En el año de 1930 fue el fin de la Revolución Mexicana en la cual hubo mucha mortandad y México apenas se estaba levantando de tan sangrienta guerra que duro 10 años.
A lo largo del siglo XX la población mexicana pasó de 13,6 a 97,5 millones de habitantes al crecer a tasas en torno al 3 % anual entre 1940 y 1980. Este aumento de la población fue debido a la industrialización del país al traer nueva tecnología en lo laboral, industrial, social y sobre todo en la medicina lo que produjo un nivel de vida mejor en las zonas urbanas, por la cual la personas de las zonas rurales emigraban a la ciudad en busca de empleo ya que la nueva novedad era lo industrial.